El hilversumense Marc Plessius (24) desapareció en marzo de 2009 en el país sudamericano de Perú. Cuatro años antes, en 2005, fue detenido en el aeropuerto de Lima con aproximadamente cinco kilos de cocaína en su mochila. La detención condujo finalmente a una condena de seis años y ocho meses de prisión, de los cuales pasó un total de cuatro años. Posteriormente, Marc fue liberado anticipadamente bajo la estricta condición de que no abandonara Perú.

Sobre Marc Plessius

Marc Julien Plessius nació el 28 de mayo de 1984 como hijo de Maya Bor y hermano de Charlotte. Cuando tenía trece años, sus padres se separaron y Marc se mudó con su padre. Allí cayó en una espiral negativa y poco a poco se desvió por el mal camino, a pesar de los esfuerzos de su madre por evitarlo. Marc estudió en el Echnaton College en Almere y, según se dice, tuvo dificultades para integrarse en la sociedad. A pesar de ello, tenía un buen grupo de amigos y mantenía un contacto cercano con su madre y su hermana, incluso durante su estancia en Perú.

Marc y su madre se vieron por última vez durante las fiestas navideñas de 2004. Poco después de este encuentro, él llamó a su madre para informarle sobre sus planes de viajar al extranjero. Su madre, que no tenía idea de que Marc estaba involucrado en asuntos relacionados con las drogas, supo un mes después que su hijo había sido detenido en el aeropuerto de Lima por tráfico de drogas.

Marc cumplió su condena en las cárceles de Lima y Cañete, en la costa occidental de Perú. Después de su liberación condicional, vivió en una pensión y tuvo que sobrevivir con el dinero que su madre le enviaba a través de la embajada. Iba allí una vez al mes, y en marzo de 2009, habló por última vez con su madre por teléfono.

Desaparecido

La familia comenzó a preocuparse cuando Marc no volvió a dar señales de vida tras esa llamada telefónica. Su hermana Charlotte hablaba con él casi a diario a través del programa de chat MSN, pero notó que en un momento dado, su hermano dejó de conectarse. La incertidumbre creció cada día, pero por razones de seguridad, la familia decidió no denunciar su desaparición a la policía en los Países Bajos. La madre, Maya, temía que dicha denuncia pudiera provocar represalias por parte de los narcotraficantes peruanos, quienes podrían culpar a Marc por un envío fallido de drogas.

Los informes desde Perú fueron diversos. En una ocasión, se dijo que Marc ya no estaría vivo, mientras que en otra, la familia recibió información de que alguien lo había visto, desnutrido, pero con vida. Se pensaba que posiblemente había vuelto a involucrarse en el mundo de las drogas.

Denuncia de desaparición

Finalmente, Maya decidió informar a la policía de los Países Bajos sobre la desaparición de su hijo. El equipo de cold cases de la policía de Midden-Nederland intentó en 2016 esclarecer el destino de Marc Plessius, pero poco pudo hacer debido a la gran distancia. En realidad, se trataba de una investigación peruana.

Sin embargo, la policía de los Países Bajos envió una muestra de ADN y los registros dentales de Marc a Perú, con la esperanza de que fueran utilizados en la investigación. Además, Marc fue registrado internacionalmente como desaparecido, no solo en Perú, sino también en Europa y Sudáfrica.

Fallecimiento Presunto

En diciembre de 2016, Maya Bor solicitó una "declaración de fallecimiento presunto", que fue finalmente otorgada. En entrevistas con la prensa, expresó que sentía firmemente que su hijo ya no estaba vivo. Gracias a un lugar en el muro conmemorativo para víctimas de violencia en Drenthe, pudo rendir homenaje a su hijo y darle un espacio al dolor. Charlotte dijo que el sufrimiento persistía, y que sin claridad sobre el destino de Marc, nunca podría haber un cierre real. En 2017 también quedó claro que no se había encontrado ninguna pista desde la desaparición de Marc Plessius.

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